Culiacán, Sinaloa.- En el municipio de Culiacán han desaparecido los estacionamientos rotativos, quitándole la oportunidad al automovilista de estacionarse hasta dos horas sin ser sancionados, lo que ha venido a afectar los bolsillos del conductor, señaló el presidente de la Comisión Independiente de Derechos Humanos, Luis Rosales Zagal
Rosales Zagal indicó que en la capital del estado no existe una correcta percepción para analizar el crecimiento del parque vehicular, ya que sólo se está favoreciendo al peatón y al automovilista lo dejan sin opciones viables, dándole más importancia a las acciones recaudatorias.
El activista lamentó que al no haber cajones donde estacionarse, resulta sencillo para el conductor estacionarse en lugares prohibidos, por lo que estas medidas son a favor de las arcas municipales y se abusa de sus bolsillos.
«Se están haciendo acciones recaudatorias a favor de las arcas municipales y abusando del bolsillo del automovilista, al no haber donde estacionarse, deja el automóvil y con la siguiente consecuencia que viene la infracción o viene la grua y se lo lleva».
El titular de la Comisión Independiente de Derechos Humanos indicó que en una ciudad donde está aumentado el parque vehicular como Culiacán, se debe realizar un análisis con una visión social, económica y futura, para dar una solución efectiva y no sólo aplicar la ley en contra del ciudadano.
Afirmó que si en la capital del estado el sistema de transporte colectivo fuera eficiente, muchos de los conductores usarían el servicio, sin embargo es «pésimo e inseguro».
Estacionamientos que violan el reglamento.
Al no contar con espacios suficientes los conductores se ven obligados a ingresar su carro en estacionamientos públicos, en donde el cobro por hora es demasiado elevado, además la mayoría de esos establecimientos no cumplen con los requisitos marcados en el Reglamento de Estacionamientos Públicos, situación que no ha sido controlada por el Ayuntamiento de Culiacán denunció Rosales Zagal.
«Al no haber espacios también están empujando por necesidad a que el automovilista estacione su carro en ese tipo de estacionamientos (…) y no hay poder alguno que meta en cintura a los dueños, ni la Profeco que es encargada de vigilar que los precios no sean exagerados, ni el Ayuntamiento ha podido aplicar la ley», acusó.
