Ciudad de México.- El IMPI (Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial) rechazó entregarle la concesión de marca con su nombre a Sandra Ávila Beltrán, conocida como La Reina del Pacífico.
La dependencia considera que su vinculación en el pasado con el narcotráfico “provocaría e incitaría” a una apología del delito y con esto, afirma, atenta contra el orden público.
La resolución publicada por el medio El Universal señala que Ávila Beltrán buscaba la entrega de la concesión de la marca por 10 años para comercializarla en servicios de negocios comerciales, industriales, empresariales, así como en marketing, publicidad y relaciones públicas.
“Podemos afirmar que si el signo que hoy se propone a registro reproduce el nombre de Sandra Ávila Beltrán, persona a la que se le atribuyen diversas acciones delictivas, de otorgarse justificaría su uso en el comercio y provocaría e incitaría a una apología del delito”, señala el IMPI.
El IMPI justificó con el artículo 12 de la Ley Federal de Protección a la Propiedad Industrial, en la que se indica que no se otorgará patente, registro o autorización a cualquiera de las figuras o instituciones jurídicas que regula esa ley cuando sus contenidos o forma sean contrarios al orden público o contravenga cualquier disposición legal.
Sandra Ávila Beltrán, cuando fue detenida se le imputaron los delitos de lavado de dinero y narcotráfico en México y Estados Unidos, además de ser señalada como intermediaria entre los cárteles de Sinaloa y Juárez con grupos de Colombia, país de donde es su expareja. La dama fue liberada.
Cuando fue detenida se describió a sí misma como una ama de casa que gana un poco de dinero por la «venta de ropa, y de bienes raíces». Preguntaba por qué había sido detenida, ella responde con indiferencia: «Por una orden de aprehensión con fines de extradición».