México.- Mario Alberto Becerril García y María Angélica Díaz Pichardo fueron sentenciados a mil 115 años y seis meses de cárcel por el delito de fraude.
Los hechos se relacionan con un esquema fraudulento que afectó a más de 240 personas, principalmente en el municipio de Tenancingo.
El comienzo de su operación se registran en 2009 y durante diez años, invitaron a numerosas personas, en su mayoría de la tercera edad, a invertir su dinero bajo la promesa de rendimientos anuales superiores al promedio del mercado, que oscilaban entre el 12 y el 20 por ciento.
Los estafadores aseguraban que, con el tiempo, los inversores podrían llegar a ser socios de la institución.
A través de depósitos en cuentas bancarias y pagos en efectivo, lograron recaudar más de 91 millones de pesos.
En 2019, cuando algunas víctimas solicitaron la devolución de su dinero y los rendimientos prometidos, los implicados se negaron argumentando falta de fondos.
Por ello las víctimas denunciaron los hechos ante la Fiscalía General de Justicia del Estado de México y después de varios meses de investigación pudieron detener a los responsables.
