Por primera vez desde 1965, Egipto abrió a los turistas dos de sus pirámides más antiguas, las cuales se localizan a unos 40 kilómetros al sur de la capital, El Cairo.
Además una colección de sarcófagos de piedra, arcilla y madera, algunos de ellos con momias, en la necrópolis real de Dahshur, informó ministro de Antigüedades, Khaled el-Anany.
La zona de la necrópolis de Dahshur alberga lo que se consideran algunas de las pirámides más antiguas, como la pirámide torcida de Sneferu y la llamada Pirámide Roja.
Una de las pirámides fue construida por el faraón Sneferu, fundador de la cuarta dinastía de los faraones de Egipto.
Con estos descubrimientos, Egipto espera que se incentive el turismo, el cual está impulsado por el interés en las antigüedades, luego de que el país se vio muy afectado por la agitación política que siguió a la revuelta social de 2011.
(AP).