Una residente del estado de California que fue acusada de tirar a siete perritos vivos a la basura, ha sido condenada a varios meses de cárcel.
Deborah Sue Culwell se declaró culpable de siete cargos de crueldad y abandono criminal de animales.
Un transeúnte que pasaba por el lugar descubrió a los cachorros en la basura, que apenas tenían tres días de vida.
Un juez de la localidad de Indio, en el condado de Riverside, condenó a la mujer a un año de prisión, que acabaron siendo reducido a 174 días de cárcel.
Culwell fue arrestada en abril pasado luego que fuera grabada en un video en el momento en que arrojaba a los cachorros a un basurero cerca de una tienda de coches de la ciudad.
Los hechos fueron en Coachella el 18 de abril pasado.
La autoridad le ha ha prohibido a la mujer tener animales hasta 2026.