A causa de la pirotecnia, una perrita murió en brazos de su dueño en la ciudad de Esquel, Argentina.
La triste historia fue compartida en redes sociales y difundida por la organización de que promueve el cuidado animal, Adoptá-Esterilizá-Educá (ADAE) con el propósito de concientizar, esto de inmediato causó indignación a miles de personas.
Al no soportar el ruido y el terror que le generaban los estallidos, la perrita de nombre Magui sufrió un ataque, posteriormente perdió la vida.
La familia al vivir estos momentos quedó desconsolada, pues nada pudo hacer por ella, ya que ningún veterinario acudió al llamado.
«Tu diversión la aturdió, la aterró, le generó un pánico inexplicable. Tu diversión la mató», escribió ADAE.