Ciudad de México.- Al participar en la Conferencia Internacional “COVID-19 y elecciones: Métodos alternativos de votación”, el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, afirmó que el mundo va a cambiar luego de la pandemia y las elecciones no son la excepción, por lo que el reto principal será mantener y fortalecer la confianza.
Enfatizó que no se le puede pedir a las personas que acepten un cambio radical en el sistema electoral, por lo que es preciso avanzar en la implementación de nuevos mecanismos y procedimientos con paciencia; es decir, paso a paso y explicar.
“No podemos transformar radicalmente nuestros sistemas electorales, porque de hacerlo podríamos generar, eventualmente, una pérdida de confianza que daría lugar, en la nueva era electoral post pandemia, a un fracaso de la democracia”, aseveró.
En el ejercicio en el que también participaron la presidenta de la Comisión Electoral Central de Georgia, Tamar Zhvania y el secretario de Estado y Director de Elecciones de California, Alex Padilla, el Presidente del INE subrayó que la democracia depende de elecciones libres, y para responder al reto de organizarlas en el escenario post COVID-19 no hay una solución única; el desafío será construir un sistema diferente sin perder la confianza.
Mencionó que, desafortunadamente, la democracia antes de la pandemia no estaba en sus mejores momentos; es decir, ya en los años anteriores se venían discutiendo varios de los retos y problemas que la democracia está enfrentando en el mundo, entre otros, las noticias falsas, el crecimiento del populismo y la desconfianza en instituciones democráticas.
Córdova Vianello expuso el caso mexicano, donde la autoridad electoral enfrentará dos retos principales: uno inmediato, este año, con la organización de las elecciones locales en Hidalgo y Coahuila, que fueron pospuestas por la emergencia sanitaria, pero “no canceladas” y donde por primera vez se implementará el voto a través de urna electrónica.
“Estamos en el pico de la pandemia, así que sería imposible tener elecciones en el próximo mes de junio en estos estados. Esperamos estar en condiciones de volver a la organización de esas elecciones y retomar las actividades que fueron suspendidas por el INE en los próximos meses, para poder realizar la Jornada Electoral antes de que inicie el Proceso Electoral Federal en septiembre próximo”, dijo, al precisar que ello dependerá de lo que establezcan las autoridades de salud.
Sobre el segundo reto, planteó que en el 2021 se organizarán las elecciones más grandes de la historia del país, donde se renovará la Cámara de Diputados, con 96 millones de votantes potenciales, además del mayor número de cargos en disputa, la mitad de las gubernaturas, casi la totalidad de los congresos locales y municipios, y en 10 estados se implementará por primera vez el voto electrónico a través de internet para los mexicanos que residen en el exterior.
Elecciones del futuro podrían combinar diversos mecanismos de votación
Lorenzo Córdova agregó que se está planeando modificar el voto en muchos aspectos. “Muy probablemente las elecciones del futuro combinarán dos mecanismos de votación: presencial y a través del voto electrónico en sus diversas modalidades, boletas electrónicas o voto por internet”.
Sin embargo, advirtió que implementar nuevos mecanismos de votación en la era de la post pandemia no puede ser la justificación para no cumplir uno de los principios fundamentales de las elecciones, que es la igualdad del voto y garantizar la posibilidad de votar de todas y todos, ya que muchas personas no tienen acceso a internet para ejercer su derecho al sufragio por esta vía.
Al responder a la pregunta si las elecciones deben ser pospuestas por la pandemia, el Presidente del INE precisó que, si se pueden garantizar el derecho a la salud y los derechos políticos para elegir a nuestras autoridades, “no pospongamos las elecciones; pero si una elección trae consigo la posibilidad de afectar la salud como un derecho fundamental, no sería una buena decisión mantener esa elección”.
Sostuvo que “no podemos anteponer la democracia en detrimento del derecho a la salud”, pero confió en que las condiciones de salud permitan mantener el calendario de las elecciones 2021.
Córdova Vianello consideró la probabilidad de que la pandemia del Coronavirus traiga como consecuencia el incremento de problemas que ya afectaban a las democracias como pobreza, inseguridad y desigualdad, pero “debemos garantizar que el sistema de elecciones no se convierta en otro problema, esta será una forma de defender la democracia”.