El viejo Culiacán está de luto. Hoy en la mañana falleció Isabel Peña Bátiz, miembro de una estimable familia proveniente de los rumbos de Sataya y que se instaló en Culiacán a principios del siglo XX. Sus padres fueron Enrique Peña Alcalde, quien nació en 1878 en la Villa de Sinaloa de Leyva y Veneranda Bátiz Paredes, quien fue la primera Q.F.B. en obtener el titulo en la Universidad de Sinaloa y que tuvo una farmacia llamada “Botica del Refugio” en la esquina de Ángel Flores y Juan Carrasco.
Tuvo varios hermanos, entre ellos, los “cuates Peña Bátiz” y Enrique quien fue un dirigente político del partido Francisco I. Madero, que participó en la lucha política por democratizar al PRI en 1965, siendo gobernador del Estado, Leopoldo Sánchez Celis, quien apadrinaba las aspiraciones de su secretario General de Gobierno, Alejandro Barrantes Gallardo, para la presidencia municipal de Culiacán, en contra de Ernesto Higuera López.
Hubo mucha resistencia política por parte del movimiento de Peña Bátiz y eran famosas las manifestaciones de protesta que se hacían acompañar de las notas del “Gallo de Oro”. Fue un movimiento que involucró a todas las rancherías y colonias de la capital del estado. Finalmente se declaró nula la elección y en otra contienda electoral, salió victorioso Alejandro Barrantes Gallardo. En el fondo el pleito era de corte nacional entre el Presidente del CEN del PRI, Carlos Alberto Madrazo y el Gobernador Leopoldo Sánchez Celis.
En un libro publicado por la familia denominado “Nuestras Raíces” escrito por Héctor Peña Bátiz, se describe el origen de la familia que se asentó en la ciudad de Culiacán, con profundas huellas en la vida política, económica y social del siglo XX. Se va Isabel, la última de la gran estirpe de los Peña Bátiz.