Culiacán, Sinaloa.- El gobernador Rubén Rocha Moya denunció la existencia de un sistema de cámaras y micrófonos que realizaban labores de espionaje, que fueron instalados de manera furtiva en el tercer piso de Palacio de Gobierno.
Al revelar esto derivado de preguntas que le formularon sobre un software de espionaje que se compró en el sexenio de Ordaz Coppel, el mandatario decidió dar a conocer que han descubierto una red de espionaje.
Precisó que hace días, por error, la secretaria de Bienestar, Ruth Díaz Gurría, descubrió las pisadas de zapato en una mesa de su oficina, lo que la llevó a investigar y localizar cámaras con micrófonos ocultos en el plafón de su oficina.
Dijo que tras este primer hallazgo, en una revisión minuciosa de Palacio, empezaron a localizar cámaras y cables en el plafón de su despacho, en la oficina del secretario de Finanzas, Enrique Díaz y en la de Gobierno, Enrique Inzunza.
Develó que se sospecha que este equipo fue colocado inclusive ya en su periodo como gobernador, posiblemente en las vacaciones decembrinas que es cuando se queda sola la Unidad Administrativa.
Precisó que cinco cámaras estaban en la Secretaría de Finanzas, tres más en su despacho y una más infrarroja en la Secretaría General de Gobierno.
“Tuvo que haber complicidad de los que cuidan… lo que puedo decir es que hay complicidad”, acusó al hablar de la empresa privada que tiene a su cargo la vigilancia del Palacio de Gobierno.
Rechazó que la administración vaya a tomar medidas como una denuncia penal ante alguna de las fiscalías, para dar con él o los presuntos responsables, tanto materialmente, como intelectualmente.
Rocha Moya no descartó que aquí haya “fuego amigo” involucrado.
Adelantó que tomarán medidas para evitar vuelva a pasar eso.
