Como se lo dijimos el 1 de abril en este mismo espacio, el juicio político contra el presidente de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro se llevaría a cabo y así fue. Ya está en proceso y autorizado por diputados, por desacato a las leyes.
Avalado el procedimiento, se han corrido con los trámites legales de lo aprobado por el Congreso el pasado viernes 22 de abril.
En algunos medios de comunicación se ha dicho que el alcalde ya fue notificado, lo cual es falso. No lo era hasta el cierre de esta columna.
El personal enviado por el Congreso el martes al despacho del edil en el Ayuntamiento no fue exitoso. No lo encontraron y no se corrió con el trámite como lo marca la ley. Hasta ayer se le buscaba, sin tener éxito.
Ahora, la información a la que tuvimos acceso señala que el funcionario se ha estado ‘escondiendo’ para evitar ser notificado del procedimiento que se le sigue desde el Congreso, toda vez que, en su calidad de abogado, sabe perfectamente que hay plazos para hacerlo.
Sin embargo, según lo transcendido, ya se buscan otros mecanismos para dar por enterado al funcionario.
Ayer se informaba de manera extraoficial que el alcalde Jesús Estrada se había ido a la Ciudad de México, pero se omitió dar a conocer su agenda en la capital del país. El área de Comunicación Social no emitió ningún comunicado de su gira, lo que hace presumir que se trató de una agenda privada.
¿A qué habrá ido a ver el funcionario? Hay quienes presumen ya que Jesús Estrada viajó a la Ciudad de México a buscar protección política para evitar ser enjuiciado. En días pasados ya había anunciado que buscaba una audiencia con el presidente López Obrador para contarle “la película completa”. Lo cierto es que el proceso está iniciado y pasará a la historia como el primer alcalde de Culiacán en abrírsele un juicio político.
Lo cierto es que el funcionario hoy reaparecerá en la sala de Cabildo. Mientras tanto, el Congreso tiene hasta 60 días para dictaminar si procede acusación como dice la Constitución. Veremos qué pasa.
PED Sinaloa.
En otros temas, ayer el gobernador Rubén Rocha Moya presentó a la sociedad su Plan Estatal de Desarrollo 2022-2027. Se le vio tranquilo, con un discurso corto, fácil de digerir, concreto y sin parafernalia.
Demostró transparencia y disposición en los temas de programas sociales y combate a la corrupción, éste último uno de los temas más complejos dentro de un gobierno, al grado que pidió a los partidos y a los medios, vigilar a su gobierno y fue más allá: a su misma familia.
El evento desarrollado en el MASIN contó con una asistencia nutrida de los diferentes grupos de la sociedad. Toda la plana mayor de la política.
Entre los participantes llamó la atención la presencia del prominente empresario sinaloense, no solo con ámbito nacional e internacional. Nos referimos al presidente Ejecutivo del Grupo Coppel, Agustín Coppel Luken, quien por cierto ha mostrado hacer buen equipo con el mandatario sinaloense.
¿Se integra con Rocha?
Nos enteramos que el ex líder del STASE, Gabriel Ballardo Valdez ha andado muy activo en el Gobierno del Estado. Trabajadores nos confirman que han visto al stasista en reuniones con el director general de la Comisión de Vivienda (CVIVES), ‘Tony’ Castañeda Verduzco. Y no solo con el director, sino con la misma secretaria de Bienestar y Desarrollo Sustentable, Ruth Díaz Gurría, con quien ha asistido a reuniones privadas.
¿A caso el ex líder del STASE se irá a trabajar al gobierno de Rubén Rocha Moya? Sí es así, eso demuestra que Ballardo Valdez ha sido bien visto por esta administración. Dicen que en política nada es casualidad. Atentos.
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