Jesús Aguilar padilla, nació en un pueblecito de Cosalá y su niñez la vio pasar en Palmitas, municipio de Angostura. La educación superior la hizo en la UAS y formó parte de la generación Centenario, de la que fue padrino el Lic. Porfirio Muñoz Ledo.
Cuando estaba en la universidad alternaba su tiempo como locutor en la XECQ, ubicada por la calle Mariano Escobedo, donde fraternizó con el también locutor y jefe político, Juan S. Millán. Al graduarse fue invitado por sus compañeros de generación a unirse al entonces Subsecretario de La Reforma Agraria, Gonzalo M. Armienta, al lado del titular, Antonio Toledo Corro.
Luego al regresarse a Sinaloa, siendo Millán líder de la CTM, fue designado Delegado del INFONAVIT y también fungió como Delegado de CONASUPO, donde empezó a sonreirle la buena fortuna, con los negocios que allí se hicieron, con los productores agrícolas. Posteriormente, durante el sexenio de Francisco Labastida quiso ser diputado federal por Navolato y perdió la elección, refugiándose nuevamente en la Federación de Trabajadores de Sinaloa, junto con Abraham Velázquez Iribe, quien fungía como Secretario de Juan Millán.
No sería hasta que llegó Juan Millán al Gobierno de Sinaloa, en que Chuy Aguilar Padilla, sería nombrado Secretario de Planeación y posteriormente Millán, lo mandó al Congreso del estado, donde fungió como líder de la bancada priista y desde donde tejió su plataforma para suceder a Millán en la gubernatura, en una elección que estuvo muy competida por la asombrosa acción política, desplegada por Heriberto Félix Guerra, quien estuvo en un tris de ganarle la gubernatura.
Cuando Aguilar Padilla, asumió la gubernatura empezó el rompimiento con Millán, pues no atendió los acuerdos del Rancho El Alacrán, propiedad de Joaquín Vega Acuña, y nombró como Secretario General de Gobierno a Rafael Oceguera Ramos. En es administración, fungió como Secretario de Desarrollo Económico, el sinaloita Mario López Valdez y como Jefe de asesores, Rubén Rocha Moya, actual gobernador de Sinaloa.
Aguilar nunca pudo controlar la inseguridad prevaleciente en Sinaloa y en mayo del 2008, hizo crisis con el rompimiento de Arturo Beltrán Leyva, con el Cártel de Sinaloa. En lo personal, Aguilar se vio afectado de su salud y fue internado de emergencia, en un hospital de Tucson, donde fue tratado del páncreas que casi le cuesta la vida.
Ya repuesto volvió a Sinaloa donde retomó el mando del gobierno. Al final de su sexenio y de cara a la sucesión gubernamental, Chuy Aguilar, apartándose de los consejos de su predecesor, Juan Millán, lanzó con todo la candidatura del empresario de la carne, Chuy Vizcarra Calderón, mientras que en los Mochis se producía el «Farallonazo» donde Millán destapó a Malova como candidato arropado por el PRD y el PAN.
Al final, Chuy Aguilar perdió la contienda y arrastró a la derrota a su candidato Chuy Vizcarra. Después de esa elección, Vizcarra, declaró que ya no volvería a la política. Mientras tanto, Chuy Aguilar siguió haciendo política partidista, y fue designado Delegado General del PRI en Nayarit, donde perdió la mayoría de las posiciones políticas. Luego el Presidente Enrique Peña Nieto, lo designó Subsecretario de Agricultura. Después regresó a Sinaloa, donde se dedicó a la agricultura y a realizar inversiones inmobiliarias en el Desarrollo Urbano Tres Rios.