Culiacán, Sinaloa.- Con la asistencia del gobernador Rubén Rocha Moya, el pleno del Consejo Estatal de Desarrollo Rural Sustentable aprobó de manera unánime el plan tentativo de siembras para el ciclo agrícola Otoño-Invierno 2024/2025.
El plan contempla una siembra de 490 mil hectáreas en todo Sinaloa, la mayor parte para el cultivo de maíz, con 295 mil hectáreas, tomando en consideración el volumen de almacenamiento de las presas, que es el 31.7 por ciento en promedio al corte del pasado domingo 29 de septiembre.
Durante el desarrollo de la reunión, que se prolongó por más de tres horas, el gobernador Rocha hizo el compromiso con los productores agrícolas de apoyar con recursos económicos para rescatar de agua de los pozos profundos para incorporarla a los canales de riego y de esta manera aumentar el volumen de agua disponible para sembrar los cultivos.
Cabe destacar que el año pasado el Gobierno del Estado también apoyó a los Módulos de Riego para estas tareas de extracción de agua, logrando incrementar en 100 mil hectáreas el plan de siembras que se hizo también por parte del Consejo Estatal de Desarrollo Rural Sustentable, como en esta ocasión, pues es la instancia donde se toma la decisión de manera consensuada para determinar las hectáreas a sembrar y los cultivos.
En su mensaje a los productores, el gobernador Rocha también se refirió a otros temas que importan a los agricultores, como es la seguridad, y al respecto dijo que el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional permanecerán en el estado realizando operativos.
Por lo que toca al plan de siembras, el secretario de Agricultura y Ganadería, Ismael Bello Esquivel, presentó una propuesta en base a la disponibilidad de agua almacenada en las presas, y sin considerar todavía los volúmenes que se logren en el programa de rescate de agua de los pozos, la cual sometió a la consideración de todos los productores, y que fue aprobada por unanimidad.
Dicha propuesta considera para maíz blanco, una superficie de 295 mil hectáreas (el 60.2 por ciento del total) con una producción estimada de 3 millones 245 mil toneladas; para maíz amarillo, una superficie de 10 mil hectáreas, con una producción estimada de 10 mil toneladas; para el frijol, un área de cultivo de 60 mil hectáreas, que arrojarían tentativamente una cosecha de 120 mil toneladas; para el sorgo, una superficie de 30 mil hectáreas, y una producción de 255 mil toneladas; para el trigo, un área similar de 30 mil hectáreas, y una cosecha estimada en 174 mil toneladas; para el garbanzo, una superficie de 60 mil hectáreas y una producción de 132 mil toneladas; y por último, para el cártamo, un área de 5 mil hectáreas, con una cosecha tentativa por el orden de las 11 mil 500 toneladas.
De esta manera, explicó Ismael Bello Esquivel, se tendrá de manera provisional una superficie de 490 mil hectáreas de riego, que es poco más de la mitad del total que existen en todo el estado, y una producción de 4 millones 047 mil 500 toneladas de los siete cultivos programados.
Una vez aprobada la propuesta del plan de siembra, el secretario de Agricultura aclaró que no está cerrada la posibilidad de incrementar el número de hectáreas, pues esto dependerá de la disponibilidad de más agua en las presas, producto de la temporada de lluvias que aún no termina, o de la presencia de algún fenómeno meteorológico como una depresión tropical o un huracán, que aporte más agua a las cuencas de las presas.
También hizo un llamado a los productores a privilegiar los cultivos de baja demanda de agua, y no escoger todos únicamente el maíz, pues existen otras alternativas rentables de bajo consumo como el frijol y el garbanzo.