Ciudad de México.- Los indicadores del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) anticipan una recesión de la economía mexicana, al interpretar sus mediciones anticipadas de indicadores clave de la producción de manufacturas, consumo y los servicios.
La pandemia del Covid-19 ha tenido un efecto severo en los mercados financieros y en la actividad económica global.
“Los resultados del Indicador IMEF de marzo anticipan una recesión de la economía mexicana inducida, principalmente, por una severa y rápida contracción del sector no manufacturero (comercio y servicios), asociada a las medidas implementadas para frenar la propagación del coronavirus”, dijo el Instituto en su reporte mensual.
Los resultados del Indicador IMEF de marzo anticipan una recesión de intensidad equiparable a la sufrida en 2009, aunque en esta ocasión el sector más afectado será el no manufacturero, integrado por empresas del sector servicios y comercio. Por lo anterior, se espera que esta recesión tenga un mayor impacto sobre el empleo.
Los efectos dañinos.
Una son las medidas implementadas en Estados Unidos para contener la propagación del virus ocasionarán una contracción de la actividad económica mientras dure la contingencia y eso afectará a la economía mexicana a través de menores exportaciones, remesas y turismo.
En segundo término, el incremento de la aversión al riesgo por la pandemia ha golpeado a los mercados financieros internacionales, particularmente a los de economías emergentes. Esta situación ha comenzado a reducir la disposición de recursos del exterior para nuestro país, lo cual se ha reflejado en el tipo de cambio y las tasas de interés.
Otro factor es la dramática caída de los precios de las materias primas, en particular del petróleo, representa un severo choque adverso para Pemex y las finanzas públicas. La reciente baja de la calificación de S&P Global para la deuda soberana y de Pemex señala la debilidad estructural que perciben los mercados ante los nuevos choques.