China lanzó el módulo principal de su primera estación espacial permanente, la cual albergará a taikonautas (como llaman a los astronautas en la República Popular de China) durante un plazo lago, el último éxito de un programa que ha cumplido varias de sus crecientes ambiciones en los últimos años.
El módulo Tianhe, o “Armonía celestial», que despegó a bordo del cohete Long March 5B desde el Centro de Lanzamiento Wenchang, en la provincia insular de Hainan, en el sur del país, es otro gran hito en la carrera espacial del gigante asiático.
Fue la primera de las 11 misiones necesarias para completar, abastecer y tripular el puesto orbital a finales del próximo año.
El programa espacial chino también trajo a la Tierra recientemente las primeras muestras lunares en más de 40 años y espera aterrizar una sonda y un vehículo de exploración sobre la superficie de Marte a finales del próximo mes.
Minutos después del despegue, el carenado se abrió para exponer la Tianhe en la parte superior de la parte central del cohete, con los caracteres “China Manned Space» inscritos en el exterior. Poco después, se separó del propulsor, que orbitará durante una semana antes de volver a caer a la Tierra, y minutos más tarde desplegó sus paneles solares que le proporcionarán una fuente estable de energía.
El lanzamiento promueve la estrategia de “tres pasos” para construir el programa espacial tripulado de China y es “un importante proyecto de vanguardia para construir un país poderoso en ciencia y tecnología y (ciencia) aeroespacial”, apuntó el mensaje del mandatario.