Tammy Bruce, Vocera del Departamento de Estado de EU, confirmó que tan solo el 23 de enero, fueron deportadas a México dos mil personas extranjeras por tierra y aire.
En su primer día como presidente de Estados Unidos, Donald Trump declaró la migración una emergencia nacional, encargando a las fuerzas armadas de su país que ayudaran a la seguridad fronteriza.
La Cancillería de México reiteró que, en el marco de su “muy buena relación” con el gobierno de Estados Unidos, la administración de Sheinbaum acepta “la llegada de mexicanas y mexicanos a nuestro territorio con los brazos abiertos”, una manera diplomática de refrendar que solo recibirá a los connacionales en territorio mexicano.
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