Científicos mexicanos descubrieron que la pimienta negra tiene propiedades que podrían ayudar a combatir el COVID-19.
Este fin de semana, investigadores del Cinvestav dieron a conocer en un comunicado de prensa que es posible emplear alcamidas y piperamidas, dos compuestos obtenidos de la pimienta negra, para ayudar en la lucha contra la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2.
Orgullo negro.
Las alcamidas y piperamidas obtenidas de la pimienta negra tienen propiedades bactericidas, fungicidas, antiinflamatorios, anestésicos e incluso antivirales.
Juan Vázquez Martínez, egresado del Cinvestav y titular de la investigación, en conjunto con los investigadores del Cinvestav Irapuato, Mercedes G. López y Jorge Molina Torres, identificaron y analizaron a través de modelaciones por computadora, un tipo de piperamidas que pueden contener la propagación del SARS-CoV-2 en el organismo.
¿Un milagro?
Se trata de la piperciclobutanamida B, una piperamida dimérica que se encuentra en la pimienta negra y, de acuerdo con los modelos computacionales, tiene la propiedad de inhibir la proteasa principal del nuevo coronavirus y, en consecuencia, inactivar la replicación del virus en el organismo.
El virus SARS-CoV-2 pertenece a un grupo llamado virus de ARN de sentido positivo de cadena simple, y su genoma es una cadena sencilla con la característica de que la célula del organismo lo reconoce como si fuera un ARN mensajero.
“Nosotros vimos que el mayor efecto de las piperamidas es bloquear aquellas proteasas encargadas de madurar las proteínas relacionadas con la propagación del virus y de esta manera se estaría evitando la infección”, explicó el egresado del Cinvestav.
Los investigadores también realizaron simulaciones bioinformáticas para evaluar el potencial farmacológico de la piperamida, a fin de conocer el perfil de absorción, distribución, metabolismo y excreción, con lo que pudieron determinar que en caso de ser empleado como antiviral, la administración recomendada es por vía oral.
Para apoyar.
Ahora los investigadores esperan llevar a cabo estudios in vitro, para lo cual están en busca de recursos con lo que puedan adquirir la proteasa del nuevo coronavirus, la cual ya se encuentra a la venta para investigación, a través de un kit de ensayo para el método ELISA, donde es posible hacer pruebas de inhibición in vitro.