La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) activó el Protocolo de Atención para Varamiento de Mamíferos Marino tras el hallazgo de más de 130 lobos marinos muertos en una playa.
En atención a una comunicación de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) se trasladaron a las Playa San Lázaro, Bahía de Ulloa, municipio de Comondú, Baja California sur.
Como medida inicial, personal de la Profepa de oficinas centrales y de su representación estatal realizó un recorrido terrestre durante tres días en aproximadamente 130 kilómetros, donde contabilizó 137 cadáveres de lobos marinos de California (Zalophus californianus); 136 machos y una hembra.
Inicialmente no se observó en ellos marcas de origen antropogénico provocadas por redes (artes de pesca) o golpes y cortes causados por algún tipo de embarcación.
De acuerdo a la información, estos ejemplares, cuatro se encontraron recién varados, por lo que, conforme al “Protocolo de Atención para Varamiento de Mamíferos Marinos”.
No saben de qué murieron.
Se procedió a su medición y se les tomaron muestras de cerebro, pulmón, corazón, hígado, riñón y grasa corporal para determinar las posibles causas de muerte.
La Profepa informó que distintos laboratorios practicarán análisis histopatológicos, toxicológicos y bacteriológicos de las muestras tomadas por la Profepa, a fin de que expertos las estudien y determinen las posibles causas del varamiento y muerte de los ejemplares de lobos marinos hallados sin vida.
