Estados Unidos.- Desde este jueves un incendio forestal que se propaga velozmente ha causado que los habitantes del sur de California tengan que abandonar sus hogares.
El fuego ha destruido más de 130 viviendas y los cuerpos de bomberos aún continúan tratando de controlar las llamas.
Las llamas se iniciaron durante la mañana del miércoles en el condado de Ventura, al norte de Los Ángeles y amenazan una amplia zona en donde viven unas 30,000 personas.
Las autoridades informaron en la tarde del jueves que el incendio solo estaba controlado en un 5%, aunque se espera que los vientos favorezcan la labor de los bomberos durante la noche.
El gobernador de California, Gavin Newsom, visitó el jueves las comunidades afectadas y declaró el estado de emergencia en la zona más castigada de Ventura.
Más de 14,000 residentes recibieron órdenes o advertencias de evacuación principalmente en las localidades de Camarillo, Somis y Moorpark, informó el miércoles el sheriff de Ventura, Jim Fryhoff.
Los bomberos lanzaron agua desde helicópteros durante toda la noche, y varios equipos intentan contener el fuego por tierra. Sin embargo, fuertes vientos y la baja humedad complican la situación.
Unas 70,000 personas de la región se quedaron sin servicio eléctrico debido a cortes preventivos, de acuerdo con la compañía proveedora Southland.