El problema del precio del maíz y el trigo que sea sustentable como negocio para los productores ha sido un tema de mucho debate donde ha habido de todo, ha llegado a niveles de tensión, de opiniones muy diversas y hasta ocurrencias que han rebasado fronteras, todo al calor de la intención de darle solución a un problema nada fácil y mas importante para la región y el país.
Las conclusiones a las que se pueden llegar, es que las causas son históricas, que vienen de hace 30 años, cuando se firmo el TLC con todas las asimetrías económicas de México respecto a Estados Unidos y Canadá, donde no se pactó ninguna compensación por esas asimetrías para México, como si ocurrió en España y Portugal en 1985 cuando se adhirieron a la unión europea compensándoles sus asimetrías económicas con un apoyo de 30 mil millones de dólares, capital que le sirvió en ambos países para invertir en esas debilidades competitivas.
Existe un cúmulo de factores que juegan en contra de nuestros productores la falta de atención de los diversos gobiernos en los últimos 30 años con políticas publicas inexistentes para el sector agrícola. Asi como factores internacionales como la guerra de Ucrania y la crisis económica post pandemia, y por si algo nos faltara, ya que el país es dependiente en la producción de granos, específicamente el maíz, se realiza una importación masiva de este grano, mayormente de los Estados Unidos. Ante todo esto los productores, en la medida de sus posibilidades económicas, son afectados en todas las etapas del proceso de producción que al final repercuten en el cálculo de precios y la comercialización.
Evidentemente durante este proceso de lucha de los productores, surgieron muchas tareas para las organizaciones de productores que deben organizarse mucho mejor, empezando por jerarquizar sus problemas, crear equipos conjuntos de trabajo para atacar los problemas juntos y construir una oficina de trabajo entre gobierno y productores que trabajen conjuntamente. No puede parecer un problema que se da cada año, como si fuera nuevo.
Es mucho el trabajo por delante pero es urgente encontrar una salida a la crisis del precio actual. ¿Funcionarán los programas de compra del gobierno federal y estatal por dos millones de toneladas? Lo cual resolvería el problema social más urgente con los productores, pero ¿Qué hacen con el diferencial de precio de los 4 millones de toneladas?¿Quedan a la inercia del mercado?¿Los apoyará el gobierno?¿Con qué?¿Cómo?.
Es obvio que una solución total no es fácil y que las soluciones parciales son difíciles, como la compra del gobierno estatal de 500 mil toneladas, pero lo que si urge es que las soluciones caminen lo mas rápido posible.
Creo que lo mas recomendable es el trabajar en conjunto para encontrar la solución, las controversias políticas enrarecen e irritan el ambiente de las negociaciones que lleven a posibles soluciones. El gobierno tiene que ser muy práctico y eficaz.
