La sucesión en Sinaloa, siempre ha motivado la participación de los políticos que aspiran a ser el abanderado del PRI, para contender por la gubernatura del estado. Sinaloa había vivido un proceso muy competitivo entre Jesús Vizcarra Calderón y Mario López Valdez, por allá en el año de 2010. Vizcarra perdió la gubernatura de Sinaloa y le confió en una entrevista al periodista Jorge Luis Télles, “yo no se como estuvo la cosa, pero a mí me chingaron”. Optó por desaparecer de la vida pública de Sinaloa y se refugió en California, desde donde hacía visitas esporádicas al estado, para ver sus negocios, principalmente el de Sukarne.
Cuando los tiempos políticos marcaron el proceso de sucesión de Mario López Valdez en el 2016, varios políticos sinaloenses mostraron públicamente sus aspiraciones por ser el candidato del PRI y contender en la elección constitucional. Entre ellos, Aarón Irízar López, Alfredo Villegas Arreola, Daniel Amador Gaxiola, David López Gutiérrez, Diva Hadamira Gastélum Bajo, Gerardo vargas Landeros, Heriberto Galindo Quiñónez, Oscar lara Aréchiga, Sergio Torres Félix y Quirino Ordáz Coppel. Todos ellos se reunieron con el Presidente del CEN del PRI, Manio Fabio Beltrones, a quien le entregaron un “acuerdo de unidad para el futuro de Sinaloa, mediante el cual se comprometieron a mantener la unidad y apoyar al candidato que resultara electo por el partido, conforme a los procedimientos estatutarios y en los términos de la convocatoria correspondiente.
A esa reunión celebrada en los primeros días de enero del 2016, en la sede del PRI Nacional, asistieron además, la Secretaria General del CEN del PRI, Carolina Monroy del Mazo, la Presidenta del PRI en Sinaloa, Martha Tamayo de King y el Delegado General del CEN del PRI en Sinaloa, el jalisciense, Ramiro Hernández García. Finalmente, los sinaloenses conocimos de la designación del diputado federal, Quirino Ordáz Coppel, como candidato del PRI al Gobierno de Sinaloa. El desencanto envolvió a los demás pretensos. Los apoyos en campaña fueron muy tibios y Quirino tuvo que enfrentar el reto de recorrer la geografía sinaloense, visitando grupos de interés, organizaciones políticas y sociales, para promover su candidatura y darse a conocer en todo el estado.
Finalmente Quirino ganó las elecciones constitucionales y se convirtió en Gobernador del Estado, realizando acciones para enderezar al maltrecho gobierno que dejó Malova, efectuando restricciones en el gasto y realizando distintos movimientos en el aparato de gobierno, al tiempo que en dos años de gestión, se han logrado avances en el equilibrio del presupuesto y se han llevado a cabo obras por todo el estado, principalmente en el Puerto de Mazatlán, donde se remodeló el centro histórico. A casi dos años de que termine su gobierno, la euforia por la sucesión ya ha iniciado. En MORENA, cuya bancada domina el Congreso del Estado y mantienen las principales ciudades del estado bajo su control y dirección, ya ha aparecido en la palestra pública, el Senador Rubén Rocha Moya, como un fuerte aspirante a la candidatura al Gobierno de Sinaloa. También se menciona al Súper Delegado, Jaime Montes Salas, como un fuerte adversario por MORENA, para hacerle competencia en la contienda, al originario de Batequitas, Badiraguato.
En las filas del PRI, hay que mencionar al Presidente del CDE en Sinaloa, Jesús Valdez Palazuelos y al Secretario de Desarrollo Social, Álvaro Ruelas Echave, al igual que al diputado federal, Alfredo Villegas Arreola y en especial al joven Senador Mario Zamora Gastélum. Del ex secretario General de Gobierno de Malova, Gerardo Vargas Landeros, se dice que estaría por dejar las filas del PRI y sumarse a MORENA, aunque semanas atrás buscó afanosamente ser tomado en cuenta por la dirigencia nacional, para hacerse cargo en Sinaloa, de la dirigencia estatal.
Lo más sorprendente sin duda alguna, fue la reaparición pública que hizo el empresario Jesús Vizcarra Calderón, con motivo de la gira presidencial de AMLO por Sinaloa. En el primer día de la visita presidencial, después del evento celebrado en Palacio de Gobierno, Quirino Ordaz Coppel, ofreció una cena al Presidente en el Hotel Lucerna. Ahí en el lobby apareció Vizcarra abrazando al presidente junto con Quirino, cuya fotografía fue difundida a través de las redes sociales y en la prensa escrita.
Algunos interpretan este muestreo de Vizcarra con el Presidente López Obrador, como la gran oportunidad para mandar un mensaje a la ciudadanía que el empresario de la carne, está de vuelta en los reflectores de la política y que pudiera ser la figura central de una candidatura al Gobierno de Sinaloa, apoyada por el PRIMOR, lo que le daría una extraordinaria fortaleza a esa candidatura, pues no cabe duda que Quirino podría hasta impulsar esa novedosa candidatura, con el apoyo del propio Andrés Manuel López Obrador. Tiempos traen tiempos y estos ahora son de unidad en la expresión política amalgamada de dos fuerzas políticas que se fundirían para mostrar lo que sería una candidatura exitosa en Sinaloa. Como anticipo, ahí está el vehemente apoyo del Presidente al Gobernador de Sinaloa, en la lid que sostuvo con el Congreso del Estado.
