Un grupo de mujeres ha surgido en el lugar donde se originaron los autodefensas, quienes decidieron portar armas para defenderse del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Algunas de las mujeres vigilantes están embarazadas y otras cargan con sus pequeños niños; muchas de ellas han perdido hijos, esposo y hermanos por los violentos ataques del grupo delincuencial.
Una de las víctimas de este escenario violentos quien pidió que no se mencionara su nombre debido a que tiene familiares en zonas que están controladas por el CJNG, señaló que el cártel secuestró y desapareció a su hija de 14 años.
“Vamos a defender a los que nos quedan, a nuestros hijos que nos quedan, los vamos a defender con nuestras vidas”, agregó.
Estas mujeres temen la llegada del grupo de delincuencia organizada por lo que defienden la zona rural a través de caminos de terracería para impedirlo.
Ellas también tienen en su poder una camioneta blindada, un tanque casero y organizan barricadas y retenes en las carreteras ante el temor de que se lleven y desaparezcan más de sus familiares.
«Han desaparecido muchos. Muchas muchachas también jovencitas», aseguró Eufresina Blanco Nava, cuyo hijo, de 29 años, un recolector de limones, fue secuestrado presuntamente por miembros del cártel.
Con información de AP.