Luis Vega Aguilar era el hombre fuerte, el de mayor confianza dentro del PRI del ex presidente Enrique Peña Nieto y del ex secretario de Hacienda Luis Videgaray.
Por ello, de acuerdo con diversos priistas consultados, estuvo casi ocho años en el cargo de secretario de Finanzas del tricolor, su posición era “inamovible”, “la única cuota” que pedían desde el gobierno para controlar el partido.
Y así fue desde su llegada en 2011, con Humberto Moreira, hasta su salida en 2018 con Claudia Ruiz Massieu, vio pasar a 10 dirigentes del PRI, a quienes difícilmente rendía cuentas, “él se entendía en Los Pinos”.
Sinaloense de nacimiento (El Fuerte), se formó políticamente en el Estado de México, donde conoció a unos jóvenes Peña Nieto y Videgaray. De 2004 a 2011 fue secretario de Finanzas del PRI mexiquense, desde donde -de acuerdo con priistas- impulsó y gestionó apoyos para la precandidatura presidencial de Peña Nieto.
Su arribo a la Secretaría de Finanzas del PRI nacional fue de la mano de Moreira, en marzo de 2011.
Ya probado como operador financiero, desde el CEN se encargó de gestionar recursos con los candidatos del PRI para la campaña de 2012.
Incluso el PRI evadió el rebase topes de campaña gracias a una fórmula de prorrateo de los gastos entre el candidato presidencial y los abanderados para legisladores.
El trabajo era sencillo, cuentan los priistas que atestiguaron su operación: “Estaba facultado para llamar a los gobernadores de nuestro partido para que inyectaran recursos, sabían que era la voz del candidato”.
Con la elección presidencial ganada con amplio margen, Vega Aguilar se mantuvo en el PRI; tenía el mecanismo de los recursos y la bendición de Los Pinos.
De acuerdo con las declaraciones de Emilio Lozoya, dadas a conocer por el fiscal general, Alejando Gertz, el ex director de Pemex entregó 84 millones de pesos “al secretario de Finanzas de un partido”.
PAN y PRD carecen de esa cartera en sus estructuras. El dinero, de acuerdo con lo declarado por Lozoya, se usó para el pago a “legisladores” a fin de que aprobaran las 11 reformas estructurales emanadas del Pacto por México.
Vega Aguilar participó en 45 elecciones estatales a gobernador, donde, de acuerdo con priistas consultados, “jineteaba los recursos. Solo él estaba legitimado para hablar con los candidatos y luego gobernadores. Lo recomendaban desde Los Pinos”.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía de Chihuahua, que sigue el rastro de los desvíos del ex gobernador César Duarte, Vega Aguilar fue el vínculo entre la administración estatal y el partido para llevar los recursos a las actividades proselitistas.
El último trabajo de Vega Aguilar fue la campaña presidencial de José Antonio Meade, al tiempo que buscó una diputación federal, misma que perdió por la derrota histórica del tricolor.
Bertha Isabel Duarte Gómez, hija del ex gobernador de Chihuahua, César Duarte, promovió un amparo contra cualquier orden de aprehensión que se pretenda ejecutar en su contra y contra una posible solicitud de detención provisional con fines de extradición.
Sin embargo, su petición no ha sido admitida a trámite porque Julio Veredín Sena Velázquez, juez séptimo de distrito de amparo en materia penal, le pidió aclarar su demanda, debido a que es confusa, por lo que tiene un plazo de cinco días para hacerlo.
Veredín Sena advirtió que, de no desahogar las prevenciones mencionadas, se acordará lo que en derecho corresponda.
Con información de Milenio
