Cosalá, Sinaloa.- Cientos de personas, entre ellos comerciantes y transportistas se unieron para rechazar el paro laboral que se mantiene en la mina San Rafael.
Los habitantes del Pueblo Mágico pidieron, en solidaridad a los trabajadores, que este reactive esta empresa, toda vez que les afecta en los comercios y la falta de empleo para el transporte de material.
Sin importar la ligera llovizna que caía en ese momento, las familias salieron con pancartas de rechazo, y al son de las frases ¡Queremos trabajar, queremos trabajar!, recorrieron las calles del pueblo.
Durante el trayecto los manifestantes se introdujeron al patio del Ayuntamiento de Cosalá para pedir la intervención de la presidenta municipal, Griselda Quintana García, a quien no encontraron en su despacho.
Exigieron a la alcaldesa que solicite información a la Secretaría de Economía del Gobierno del estado para saber el avance de las negociaciones en la Ciudad de México.
Los habitantes reconocieron que este paro ya empezó a afectar la economía local, razón por la cual salieron a las calles a exigir una solución y pedir la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador. «Solicitamos la intervención de las autoridades, si la mina cierra, Cosalá se convertirá en un pueblo fantasma», decía una de las lomas pegadas a un camión de carga.
Las demandas.
Los trabajadores de la compañía Americans Gold and Silver se mantienen en huelga desde el 26 de enero tras acusar malas condiciones en ese centro de trabajo que se encuentra a unos minutos de esta cabecera.
Los huelguistas exigen un aumento salarial, mejores medidas de seguridad y frenar los fuertes daños al medio ambiente.
En este paro que cumple más de 15 días, un grupo de empleados acusa a una corriente del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros lidereada por el senador Napoleón Gómez Urrutia, de estar en colusión con directivos de la empresa, lo que ha traído consigo problemas graves de salud, despidos y contaminación al ecosistema.
Estos han asegurado que hay trabajadores ya con niveles de plomo superiores a los tolerables por el cuerpo humano al no usar equipo adecuado.
Solidaridad.
Hay que recordar que a penas el sábado cientos de mineros provenientes de los estados de Durango y Zacatecas, se unieron a sus compañeros de Cosalá en una marcha exigir que se cumpla el contrato colectivo que proponen los trabajadores locales.
Hasta la fecha la empresa sólo ha emitido comunicados de prensa rechazando los señalamientos de sus empleados, pero no se ha destrabado el conflicto que estalló desde el 26 de enero pasado.