Una empleada de una agencia de microcréditos de la ciudad rusa de Volzhski hizo frente a un peligroso ladrón armado, dio a conocer el Ministerio del Interior de la región de Volgogrado.
El joven, que iba vestido de negro y con gran cuchillo, entró en la oficina cuando la jornada laboral tocaba a su fin, saltó a la mesa de la cajera, la amenazó con su arma y le exigió que le entregara todo el efectivo.
Sin embargo, la mujer, de 34 años, no se dejó amedrentar y plantó con furia al atracador. Empezó a gritar muy fuerte y, en determinado momento, logró arrebatar el cuchillo de las manos del criminal cuando forcejeaban en el piso.
Aparentemente incapaz de soportar su grito, el sujeto logró abandonar la oficina.
A continuación, la cajera cerró la puerta y presionó el botón de pánico. Los policías que llegaron al lugar detuvieron al ladrón a pocos metros de la escena del delito, justo en el momento en que intentaba quitarle la bolsa a una transeúnte.
El detenido, de 30 años, explicó necesitaba dinero para comprar una dosis de la droga. El hombre, que está actualmente desempleado y ya ha sido juzgado seis veces por varios delitos, afronta hasta 10 años de prisión por cargos de robo armado.