Culiacán, Sinaloa. – El presidente de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro rechazó que le vaya a pedir a su hijo Jesús Manuel Estrada López, que renuncie a la dirección que ocupa dentro de la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable, ello derivado del conflicto político que mantiene con el gobierno de Rubén Rocha Moya.
A pregunta expresa de los medios como parte de un acto de congruencia, el funcionario respondió tajante en el sentido de que no fue él quien le dio «chamba».
“Yo no le di chamba, le dio el gobernador (Rocha)… ni siquiera él se lo pidió, él se la ofreció”, subrayó.
Rechazó que vaya a hablar con su hijo Estrada López para que salga de la dirección del Instituto Sinaloense de Desarrollo Social del Gobierno del Estado.
Insistió que la relación con el mandatario Rocha Moya no se ha roto durante la instauración de su juicio político, sino que tiene «malos asesores».
Reciben amenazas.
El alcalde dio a conocer que sus colaboradores han sido amenazados «hace días» durante este conflicto político, pero se negó detallar en qué sentido son y quiénes son los ofendidos.
«Luego los vamos a saber», destacó sin abundar a los medios.
Reconoció que estas amenazas sí le afectan a su persona, por ser colaboradores cercanos a él.
