Culiacán, Sinaloa.- Sin decirse osado o presuntuoso, el ex senador de la República, Aarón Irízar López aseguró que él, en su calidad de legislador, fue el primer político que insistió ante la embajada de Malasia y el Gobierno de México, en evitar la pena de muerte de los hermanos sinaloenses, José Regino, Luis Alfonso y Simón.
“Quiero ser transparente, el que INICIÓ este tránsito, fui yo. Me llamó el paisanaje y alguien tenía que hacer algo por estos hombres. como senador ESTÁBAMOS obligados”, afirmó el ex legislador.
Narró que fue 2012, cuando al conocer la condena de pena de muerte impuesta por la Corte Superior Kuala Lumpur, le tocó abordar el tema con el entonces secretario de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade.
Afirmó que ante la embajada de Malasia en México envió un oficio, donde solicitó valorar la calidad humanitaria del sultán, mientras que ante la Cámara Alta, oficializó el tema.
“Yo creo que si nos HUBIÉRAMOS mantenido en la apatía, a lo mejor esos muchachos estuvieran muertos… no sé”, advirtió Irízar López.
Afirmó que si bien durante su mandato como senador se hicieron las gestiones posibles, insistió dejar en claro, que la última palabra la tenía el sultán.
El político sinaloense se dijo congratulado por el regreso de los jóvenes a Culiacán, de quienes consideró, si bien pudieron haber cometido un error en el pasado, ya lo pagaron con más de 10 años de cárcel, y hoy tienen derecho a recomponer su camino.
