Los problemas derivados de la inseguridad en los pueblos de los altos de Sinaloa, no es reciente. Se sabe que familias enteras han emprendido la huida de sus hogares en la serranía, desde los municipios de Choix, Sinaloa, Badiraguato, Cosalá, San Ignacio, Mazatlán, Concordia y El Rosario. Las familias desplazadas por la violencia se han refugiado con parientes en otras áreas, dejando atrás su entorno, sus casas, su ganado, sus pertenencias y tratando de edificar nuevos hogares en las colonias populares de Los Mochis, Guasave, Culiacán y Mazatlán. Donde al parecer se han acentuado estos desplazamientos es en la sierra de El Rosario, en las comunidades de la Rastra, Maloya, Santa María y Corral de Piedra. Precisamente en el mineral de La Rastra, las amenazas de gavilleros empezaron en el 2017.
Cuentan los pobladores que los atemorizaron en un principio a través de las amenazas con las armas y el despojo de los teléfonos celulares, impidiéndoles transportarse en el camión de la ruta hacia la cabecera municipal de El Rosario. Solo permitían que viajaran las mujeres y por ello, el desabasto de víveres se hizo presente, pues muchas rancherías acudían a La Rastra para comprarlos. Para el Secretario de Seguridad Pública en Sinaloa, Cristóbal Castañeda Camarillo, la causa de esta ola de violencia e inseguridad en la zona de La Rastra, se debe a la presencia de un grupo delictivo que es originario del Estado de Durango, que aseguran, busca robar el oro de las minas que se encuentran en esa parte de la serranía sinaloense.
Para el responsable de la seguridad en Sinaloa se sabe que “es más accesible para esta gavilla ingresar al estado por la zona de los altos de El Rosario, que por la zona centro del estado y que ante esa situación se encuentran implementando un operativo denominado espejo”, que “les permitirá de ser necesario, ingresar al vecino estado de Durango, en caso de detectar donde se ubica el grupo delincuencial”. El pasado mes de abril, con el objetivo de fortalecer la cooperación entre instituciones de seguridad de los estados de Durango y Sinaloa y afinar los preparativos para el operativo de Semana Santa, pero con un carácter regional, los gobernadores de los estados de Durango, José Rosas Aispuro Torres, y de Sinaloa, Quirino Ordaz Coppel, respectivamente, sostuvieron una reunión de trabajo en la Tercera Región Militar, presidida por el General de División, Carlos Ramón Carrillo del Villar, y todos los responsables de seguridad de ambas entidades.
Durante la reunión se diseñaron las estrategias a implementar en esta región, que abarca la supercarretera Mazatlán-Durango, hasta su conexión con el puerto sinaloense, a fin de garantizar la seguridad a los viajeros que utilizaron la rúa federal. El gobernador Quirino Ordaz Coppel destacó la coordinación que se mantiene con su homólogo del estado de Durango, José Rosas Aispuro. A pesar de la coordinación entre ambos estados, los problemas persisten, especialmente en la zona de La Rastra, donde los pobladores han solicitado el auxilio de la autoridad para salir de la sierra y protegerse en las zonas bajas. Hace apenas unos días, el comandante de la III Región Militar, Carlos Ramón Carrillo del Villar, declaró a los medios que “la seguridad en la zona serrana, entre Durango y Sinaloa estaba garantizada”.
Hace unos días, se logró pedir auxilio al Ayuntamiento de El Rosario y debido a la situación de violencia que vive la Sindicatura de La Rastra, un grupo integrado por 27 familias recibieron el apoyo municipal y de las fuerzas de seguridad para sacar las pertenencias de sus viviendas, según lo dio a conocer el alcalde Manuel Antonio Pineda Domínguez. Así, un grupo de 20 familias ya se encuentran en la cabecera municipal de El Rosario, mientras que el otro grupo de siete familias permanecía en La Rastra, en espera de trasladarse a un lugar seguro. Como se aprecia en esta situación de debilidad de la seguridad pública, el Gobierno del Estado está reaccionando ante esta problemática, en lugar de prevenir la entrada indeseable de gavillas por la serranía sinaloense.
Es por eso que el Gobernador del Estado, Quirino Ordáz Coppel y su Secretario de Seguridad Pública, Coronel Cristóbal Castañeda Camarillo, deben de dar certeza plena en el accionar y realizar los operativos preventivos en materia de seguridad, de manera constante, blindando el estado, con el apoyo del Ejército, impidiendo así que grupos delictivos, trastoquen las actividades mineras en ese pequeño rincón de la serranía sinaloense.