Culiacán, Sinaloa.- Dentro de la agenda del secretario de Economía, Javier Lizárraga Mercado, hay un apartado poco conocido: el seguimiento personal que hace a las empresas en crecimiento que han recibido algún tipo de apoyo.
Llega a la calle Cristóbal Colón y desciende de la camioneta Suburban blanca. A su lado, la subsecretaria de Fomento Económico, Hilde María Salgado, quien lo acompaña. En la casa lo esperan los dueños de la empresa de confección KAES, fundada hace 19 años por la familia León Vázquez.
La intención es saber los avances logrados con apoyos brindados en el pasado, y los problemas con los que se enfrenta para seguir creciendo.
Los fabricantes de ropa iniciaron en una casona ubicada justo en la calle Colón, en el sector Centro. Fue el sueño de las hijas de la familia, quienes estudiaron moda y dieron sus iniciales para fundar la compañía que lleva su nombre. Hoy tienen siete tiendas y fabrican hasta 2 mil prendas al mes.
A sus 19 años de inicio, hace un año accedieron a un primer apoyo de la Secretaría de Economía para registrar una de sus marcas.
Industria gastronómica.
Culiacán ha tenido un auge creciente en estos alimentos. Se trata el de las salsas marisqueras. Hay quienes dicen que el buen marisco de Sinaloa, sin una buena salsa, no sería lo que es hoy.
La idea de formar una empresa nació de la familia García Leal, y le pusieron “Mr. Capitán”
Hasta el fraccionamiento Cantabria llega el secretario. Desde una casa habitación adaptada se fabrican hasta 2 mil 200 botellitas. Hacer dos tipos de salsa, y próximamente una tercera, nació de una receta familiar. Víctor Giovanni, empresario que no rebasa los 25 años, pide ayuda al titular de Economía en el estado para expandir su mercado.
La empresa que fue apoyada por la Secretaría de Economía con recursos para tener una tabla nutrimental y un código de barras, ahora tiene al frente una de las más difíciles tareas: ingresar a un mercado local muy competido.
“Culiacán es donde la producimos, y es donde menos vendemos”, lamenta el empresario, quien pide ayuda para entrar a cadenas como Oxxo o Casa Ley.
Hoy su producto está en muchas mesas de varios restaurantes de Puerto Vallarta, y sólo en unos cuantos de Mazatlán y Culiacán.
Entonces el secretario, Lizárraga Mercado, le propone buscar abrirle puertas, y la facilidad para acceder a un crédito para que compre un espacio en el nuevo parque industrial Fundadores, que se pretende construir a espaldas del Aeropuerto de Culiacán.
En su recorrido de este lunes llega a otra empresa que enfrenta precisamente el mismo problema: el de la penetración a cadenas comerciales.
De la semilla al aceite.
Se trata de Morasin, que tiene un año de su fundación y también opera desde una casa. Se dedica a la siembra, elaboración y empaque de chía y ajonjolí, y sus derivados, como son aceites.
En su crecimiento, esta compañía familiar hoy se distingue por la producción de cremas con propiedades para el cuerpo elaboradas con olivo, ajonjolí y chia.
Ahí, el funcionario escucha al señor Humberto Jacobo. Se compromete a buscar los canales para ingresar a cadenas comerciales grandes como Casa Ley. Gira instrucciones claras a la subsecretaría: el de tocar puertas. La idea es ofrecer soluciones concretas que lleven al éxito de estas empresas formadas por familias sinaloenses.