Históricamente los legisladores han sido mal evaluados y en general los diputados locales, federales y senadores, por regla con las obligadas excepciones, “no rompen el molde” y en general resultan mediocres sumisos al poder y con tendencia a la corrupción, pero desde que llegó Morena y cada vez adquirió mayor relevancia y peso político, hasta llegar a dominar la mayoría del poder político y los gobiernos, esa regla se ha acentuado resultando cada vez peores y las excepciones menos que al rebajamiento de sus roles, cada vez es más notable, que a veces rayan en la vergüenza ajena y en la vulgaridad extendida.
El deterioro ha sido peor y lamentablemente sus resultados han sido como hace décadas no se veía, más sumisos, dependientes y funcionales al poder y al gobierno que reflejan corrupción ideológica, política y material, que pretenden disfrazar de pragmatismo para eludir la vulgaridad.
Por eso me asombro que sea una noticia que despierte interés político el que la senadora Imelda Castro será vicepresidente de la cámara de senadores, Como si eso significa algo para los sinaloenses.
De los senadores de Sinaloa que concluyen este 31 de agosto su mandato que empezó el primero de septiembre del 2018, más allá del senador del PRI, Mario Zamora ni Imelda Castro ni el que sustituyó a Rubén Rocha en 2021, han pintado para nada, como no sea venir la senadora a “chatear”, “que viene a saludar a su amigo el gobernador de Sinaloa Rubén Rocha Moya”, para que de ahí en fuera tan solo ha venido a criticar los movimientos sociales y echarle porras a sus líderes de la 4t empezando por López Obrador.
Del otro senador de Morena ni de su nombre me acuerdo, a quién no se le vio por ningún lado como no fueran las playas de Mazatlán.
De Mario Zamora del PRI, en lo personal le he cuestionado su falta de solidaridad y defensa de la UAS ante la persecución política que sufre en la intención de violar su autonomía, pero cabe recordar su apoyo a los productores de maíz, su defensa a la democracia política, su combate a la corrupción de SEGALMEX y su lucha contra la autocracia AMLOvista que ha establecido el presidente López Obrador.
De los diputados federales ni hablar, si usted pregunta por ellos en el estado va a encontrar que en ningún distrito saben su nombre, que no lo conocen y vaya, que hasta los periodistas dudan que existan.
Bueno, eso ni a Morena le sirvieron, ni para echar una porra siquiera y nos preguntamos ¿de qué sirven los 35 millones que recibieron cada uno en los últimos 6 años? casi 300 millones de pesos se gastaron en sus salarios y regalías, que la verdad resulta un desperdicio notable. yo conozco al hoy senador Fernández Noroña desde hace más de 30 años y por mucho que no comparta con sus opiniones y actitudes, es un personaje que desquita lo que pagan, pero ¿los de Sinaloa qué han hecho? ¿qué obra hicieron? nada absolutamente nada.
Esos diputados federales, están como los diputados locales de Sinaloa, que más allá de ser comparsas y cómplices de la persecución política contra la UAS, tampoco producen y desde que llegó el gobierno de Rubén Rocha, 1500 millones de pesos se han gastado en ellos y cabe la misma pregunta ¿qué han hecho?