Culiacán, Sinaloa.- El gobernador Rubén Rocha Moya refrendó esta mañana que existen condiciones de seguridad pública para que la sociedad recupere la normalidad tras la violencia que se vivió en Culiacán con la detención de Ovidio Guzmán.
Al encabezar una conferencia con el gabinete de seguridad, en la que estuvieron ausentes las autoridades federales, el mandatario insistió que desde ayer por la tarde de dejaron de presentar enfrentamiento en la ciudad y se disuadió la presencia de personas armadas por las calles.
Sin embargo, cuando los medios insistieron el “sentir de la población” que tenía temor por salir a las calles, fue claro en señalar, que “si tienen miedo”, no salgan.
Confió que las personas que no se sientan tranquilas, las invitó a actuar con cautela, aunque insistió que la presencia militar y de Guardia Nacional se ha reforzado en la capital y el resto del estado.
En su participación citó que fueron 19 civiles armados que murieron durante los hechos encabezados por la autoridad federal con un operativo en la sindicatura de Jesús María.
Dijo ignorar si entre las víctimas haya niños por un tema federal, sin embargo reveló que existe un menor de fue lesionado de bala en el poblado Paredones.
El mandatario admitió que el Gobierno federal nunca lo enteró de este operativo y de cuáles eran los objetivos.
Asistieron a esta conferencia el alcalde de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil, el secretario General de Gobierno, Enrique Inzunza Cázares y el secretario de Seguridad, Cristóbal Castañeda Camarillo.
