A pesar de contar con las vacunas, un hombre que asistió a boda al aire libre en Houston, Texas, contagió a varios asistentes.
Los casi 100 invitados, quienes debieron comprobar que ya tenían el cuadro completo de vacunación, se sentaron debajo de carpa.
Los primeros asistentes en presentar síntomas fueron un hombre y una mujer que viajaron desde la India para la boda. Como dato extra, la mujer tenía diabetes, mientras que su acompañante gozaba de buena salud.
Recibieron la segunda dosis de la vacuna Covaxin, fabricada por Bharat Biotech, 10 días antes de viajar. Para abordar el avión hacia Estados Unidos dieron negativo a la prueba del SARS-CoV-2.
Su primera noche en el país americano, la mujer sintió cansancio, pero no le tomó importancia pues había sido un largo camino. Cuatro días después de la boda, una vez que ambos tenían síntomas sospechosos del virus, se hicieron la prueba y dieron positivo.
Dos días más tarde de la confirmación, el hombre tuvo que ser hospitalizado donde estuvo muy grave y murió un mes después de la fiesta.
Cuatro personas, todas mayores de 50 años, que tuvieron contacto con ellos en la boda, también se contagiaron de la variante Delta del Covid. Dos de estos invitados fueron inmunizados con la vacuna Pfizer-BioNTech y los otros dos con Moderna.
Uno de los enfermos, quien tenía las vacunas de Pfizer, presentó síntomas severos y tuvo que ser hospitalizado. El resto de los infectados contaban con enfermedades preexistentes como diabetes e hipertensión. Este caso fue presentado por el Baylor College of Medicine, quien no pretende decir que las vacunas no sirven, pero sí hacer conciencia sobre la importancia de no bajar la guardia.