Tras sufrir una dolorosa derrota en el 2010, Jesús Vizcarra Calderón, cuando busco ser gobernador de Sinaloa, se retiró aparentemente de las actividades políticas y se refugió en sus negocios. Sus relaciones con el expresidente Enrique Peña Nieto y varios de los miembros de su gabinete, le permitieron a Vizcarra, ser invitado a giras presidenciales en el extranjero y a tener como invitada en alguno de sus eventos de la fundación Vizcarra, a la exesposa del exmandatario.
Los negocios reclamaban la atención de Vizcarra y no había momentos para distraerse en la política, pero los analistas, siempre lo consideraron para ser el candidato del PRI, al gobierno de Sinaloa por segunda ocasión, con motivo de la renovación de poderes en el año de 2016, las encuestas siempre reflejaban a un Jesús Vizcarra muy por encima de todos los aspirantes a la sucesión de Malova, sin embargo, en sus pocas apariciones públicas, él siempre decía que estaba retirado de la política.
Por allá en junio de 2014, el excandidato a gobernador por la alianza “para ayudar a la gente”, Jesús Vizcarra, aseguró a los reporteros, tras inagurar el laboratorio de Salud Digna en el complejo de la primavera, propiedad de la familia Coppel, que no le interesaba contender por la gubernatura en el 2016.
A Vizcarra le preguntaron si había pensado en la política recientemente y su respuesta fue tajante, “no, cero, ese es ya un capítulo que pasó. Todo lo que hago lo veo positivo, me encanta y mi deseo es servir a la gente”.
A principios del año de la elección, hubo una reunión en la sede nacional del PRI, presidida por el entonces presidente, Manlio Fabio Beltrones, a ella fueron convocados los aspirantes a la candidatura del PRI al gobierno de Sinaloa. Entre ellos estaban: David López Gutiérrez, Heriberto Galindo, Aarón Irízar López, Daniel Amador Gaxiola, Diva Hadamira Gastélum, Gerardo Vargas Landeros, Óscar Lara Aréchiga, Sergio Torres Félix, Alfredo Villegas Arreola y el tapado, Quirino Ordaz Coppel. En esa reunión se dijo que Vizcarra no participaría y declinaba a la candidatura, el seleccionado por el expresidente Peña, fue el mazatleco Quirino Ordaz Coppel.
De Vizcarra no se sabía nada, no aparecía en público, salvo sus reuniones con sus ejecutivos y sus constantes viajes, hasta que con motivo de una gira que hizo al estado, el entonces Secretario de Sedesol, José Antonio Meade, reapareció Vizcarra, siendo anfitrión en una de sus empresas. Así como reapareció Vizcarra el año pasado, volvió a desaparecer de los radares políticos y no se sabía nada de él, más que su atención directa en sus negocios, pues a pesar de que había nombrado a un director general en su empresa “SuKarne”, Jesús Vizcarra ordenó que se acondicionara una oficina junto a la del resto de funcionarios y empleados de la compañía, estaba metido de lleno en el engranaje comercial de su negocios.
Pasaron los meses y nuevamente el pasado martes, Jesús Vizcarra reapáreció en público, en un acto muy importante para la vida institucional de la UAS, con motivo de la instalación del Consejo de Vinculación Social, el cual es presidido por Vizcarra, como resultado de la petición del rector Juan Eulogio Guerra Liera y el beneplácito del líder moral de la casa rosalina, Héctor Melesio Cuén Ojeda.
Vizcarra se rodea de extraordinarios sinaloenses, entre ellos: Roberto Gutiérrez Ruelas, Raúl Carrillo Castaños, Víctor Efren Gallardo Angulo, Delia Barraza Rendón, Sergio Ley López, Sergio Goygochea Coppel, Manuel Acosta Beltrán, Luis Pérez de Acha, Jorge Francisco Frías Mendoza y Miguel Ángel Manjarres Beltrán.
En su intervención, Jesús Vizcarra, expresó: “tengo un gran reconocimiento a la Universidad Autónoma de Sinaloa y a su gestión, rector, es un privilegio este día, esta fecha, esta responsabilidad, estoy convencido de que este consejo va a contribuir en el cumplimiento de la misión y de la visión de la UAS. Tenemos el honor de ser parte del legado de usted señor rector, de esta universidad. La integración del consejo con el rector, conformamos un grupo heterogéneo con mentalidad y capacidades complementarias”.
Como Jesús Vizcarra es un hombre muy ejecutivo y disciplinado en sus quehaceres, señaló que su gestión se basará en siete puntos, los cuales serán la cobertura académica, vinculación, posicionamiento internacional de la UAS, generación de conocimiento de vanguardia, fortalecimiento de la comunidad como vocación y apoyar el fortalecimiento económico de la institución.
En su intervención, Vizcarra anunció que la primera acción del nuevo Consejo de Vinculación Social de la UAS, será “el otorgamiento de 40 mil créditos a alumnos y trabajadores de la casa rosalina, para la compra de 40 mil laptops”. Se integrará un fondo de 40 millones de pesos, de los cuales, 20 millones serán aportados por el Gobierno del Estado, 12 millones por la universidad y ocho millones, por empresarios del estado que no se rajan”.
Hasta ahí el evento académico de la UAS. Pero es importante destacar la simpatía del gobernador Quirino Ordaz Coppel hacia Jesús Vizcarra, en su nuevo encargo que le dará mayor proyección y fortaleza, si se toma en cuenta que en el fondo se trata de visualizar las fuerzas políticas representadas por Héctor Melesio Cuén Ojeda, como líder del partido sinaloense y la fortaleza de Quirino Ordaz Coppel como jefe político del PRI, lo que vendría a ser sin duda una fuerza muy poderosa, para enfrentar a Morena en el 2021, aunque Quirino diga que “falta mucha película por ver”. Por lo pronto, Jesús Vizcarra está de regreso en la política.