La demanda presentada por México ante Estados Unidos, para hacer que 11 empresas estadounidenses dedicadas a la venta de armas tengan mayor responsabilidad y eviten el tráfico ilegal de armamento, que provoca cientos de asesinatos diarios en el país se ha aplazado, y es que esta industria tiene amplia inmunidad.
Con la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México, una nueva estrategia para erradicar la violencia en el país se asomaba, y una de las tareas era evitar el ingreso de armas al país, ya que terminan en manos de los cárteles.
La demanda de México contra las empresas de armamento es de 10 mil millones de dólares por más de una década y media de contribuir a los asesinatos y tiroteos en la República y Latinoamérica.
Los distribuidores más importantes de Estados Unidos, entre ellos Smith & Wesson, Barrett Firearms Manufacturing, Beretta USA, Beretta Holding, Century International Arms, Colt’s Manufacturing Company, Glock, Glock GES.MBH, Strum, Ruger & Co ., Witmer Public Safety Group y Interstate Arms, se sumaron para pedir al tribunal desestimar la demanda de México.
Alejandro Celorio Alcántara, consultor jurídico de la SRE, habría señalado que este juicio legal en Estados Unidos se extenderá más allá del 2024, por lo que el próximo presidente de México deberá continuar con esta misión.
Los armamentistas ya están actuando de forma política, utilizando el discurso patriótico para atacar a los jueces, de este modo continuarán operando y contribuyendo a los homicidios en la República mexicana.
«Tenemos al menos 10 milloens de armas en México, no deberían estar aquí porque no las vendemos», son ilegales en la República, explicó Celorio.
El panorama se ve bastante difícil, ya que desde Estados Unidos, legalmente se permite la fabricación y el ingreso de armas letales a México que terminan en asesinatos masivos de inocentes diariamente.