Caracas, Venezuela.- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció este miércoles que posee información de un plan para asesinarlo, que se prepara desde la Casa Blanca, sede del Gobierno estadounidense.

El mandatario venezolano manifestó en una rueda de prensa que existe un «complot» desde la residencia presidencial de EE.UU. para «violentar la paz, para intentar asesinarme».

Maduro responsabilizó a John Bolton, asesor de Seguridad Nacional del presidente estadounidense Donald Trump, de dirigir el plan en su contra «para llenar de violencia el país y derrocar mi Gobierno».

Según informaciones que manejan los cuerpos de inteligencia venezolanos, Bolton ha sido designado «para instalar un consejo de Gobierno transitorio en Venezuela», luego de un Golpe de Estado.

Intento de magnicidio

Maduro responsabilizó al funcionario estadounidense de estar informado y haber autorizado el atentado fallido en su contra, el pasado 4 de agosto, y de proteger a sus autores intelectuales que se encuentran en Florida, en EE.UU.

«No tengo dudas de que el dron que lazaron para matarme lo prepararon en Colombia, bajo la supervisión del expresidente Juan Manuel Santos bajo las órdenes directas de la Casa Blanca», agregó.

Entrenamientos de mercenarios

Maduro aseveró que se «preparan fuerzas mercenarias para asesinarme» e «Iván Duque, presidente de Colombia, es cómplice».

El presidente suramericano informó que en el municipio Tona, en norte del departamento colombiano de Santander, «se entrena un grupo paramilitar denominado G-8», compuesto por 774 mercenarios entre colombianos y venezolanos.

Maduro mostró la imagen satelital de la ‘Base aérea de Tolemaida’, en el departamento colombiano del Tolima, en el centro oeste de ese país, y manifestó que allí se entrena «otro grupo de mercenarios para atacar a Venezuela».

Según las información cruzada que maneja el Gobierno de Maduro, se buscan generar acciones de ‘falsos positivos’ y ‘operaciones de bandera falsa’ para simular ataques de fuerzas militares venezolanas a Colombia e «iniciar una escalada violenta que confunda a la opinión pública» y «justifique acciones contra Venezuela».

El presidente latinoamericano refirió que el plan contemplaría ataques a bases militares de los estados venezolanos Zulia, Táchira, Apure, Amazonas por grupos que con uniformes falsos de la Guardia Nacional Bolivariana y del Ejército.

El mandatario venezolano reveló que desde EE.UU. se ha aumentado de 40 a 120 millones de dólares el monto de las partidas secretas «dedicadas al soborno y quiebre de oficiales venezolanos» para causar «un disturbio militar».

 

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